Segundo revés a los ‘soviets’ de Carmena: PP, C’s y PSOE arremeten contra Barbero en comisión
El concejal de Manuela Carmena delegado del área de Salud, Seguridad y Emergencias, Javier Barbero, vive este martes un nuevo varapalo en sus aspiraciones de sacar adelante su plan de gobernanza comunitaria con jurados vecinales y gestores de barrio a dedo. En la comisión del ramo se discutía esta propuesta desarrollada por una consultora externa, vía contrato menor a dedo de 18.000 euros, y que posteriormente fue impulsada por el Ayuntamiento. No ha recibido ni el apoyo del Partido Popular, ni de Ciudadanos ni siquiera de su socios de investidura, el Partido Socialista.
Se trata del segundo revés para el plan de gobernanza comunitaria de Barbero. Hace unas semanas en el Pleno de la Junta de Distrito de Centro donde se enmarca el barrio afectado, Latina, se reprobó a iniciativa del PP. A continuación el asunto se llevará al Pleno de la ciudad donde presumiblemente se dará la estocada definitiva al plan Barbero.
La portavoz del PP en Seguridad, Inma Sanz, ha sido la más dura. Ha arremetido contra lo que considera que son «comisarios políticos» y la «creación de un entramado institucional de inspiración o lenguaje bolivariano o soviético sin encaje en el ordenamiento» jurídico español. Por su parte su hómologo en el PSOE, Ramón Silva, se ha desmarcado de lo que tacha de «ese invento» de Ahora Madrid.
Igualmente la portavoz de Ciudadanos en esta materia, Ana Domínguez, ha reprochado que el Gobierno local quiere crear «una estructura paralela a la existente con un gestor del barrio nombrado por el Ayuntamiento, junto a una Mesa de Convivencia y jurados vecinales».
Desde el grupo popular de Esperanza Aguirre se ha pedido que «paralicen la locura del proyecto de gobernanza comunitaria en Lavapiés», el barrio donde se pretende poner en marcha el proyecto piloto. «Lavapiés necesita soluciones urgentes, no inventos bolivarianos», remarca Sanz. El PSOE no ha tardado en desvincularse del proyecto, Silva ha remarcado que su partido «no tiene nada que ver con este documento». «No nos sentimos identificados sino frente a ese modelo; con este invento, en absoluto», ha zanjado.
Barbero se defiende
El delegado del área argumenta que la policía comunitaria es un concepto «incuestionable» que ha sido probado con éxito en múltiples ciudades. Por el contrario, en referencia a los ‘soviets’, que incluyen jurados compuestos por vecinos o gestores de barrio elegidos a dedo con funciones de cacique, no se ha mostrado tan convencido.
«Es la propuesta que hace una empresa para mejorar la efectividad de la seguridad en Lavapiés», con diagnósticos participativos, con el diseño de un sistema comunitario y hablando en todo momento de un «sistema piloto». «No es un plan cerrado», ha explicitado.
«El Ayuntamiento no está implementando jurados vecinales alternativos al sistema judicial, eso no aparece en el proyecto», ha intentado aclarar el edil ex fraile. El plan, según afirma Barbero, «parte de un trabajo realizado por la empresa contratada que no es bolivariana» y apunta que «el PP planteó esos trabajos entre 2009 y 2011» dentro de un proyecto europeo.
Barbero ha expuesto en esta comisión que el Consistorio «no está implementando jurados vecinales alternativos al sistema judicial». En su lugar, dice que se tienen que circunscribir a esquemas de trabajo que hablan de «tendencias» y «de determinadas buenas prácticas en contextos similares».